
Este año no he sido muy bueno, por eso no os escribo para pediros nada, sino para daros ideas de cómo envolver los regalos que llevaréis a la gente que ha sido buena.
Hay muchos recursos, desde los envoltorios clásicos con horribles lazos, hasta los regalos enlatados, una forma muy original... pero, ¿y si no tienes un abrelatas a mano... que haces?
El papel de regalo reversible da la posibilidad de hacer juegos de color con pliegues y dobleces. También se pueden envolver los regalos con papel de periódico (ecológico pero un poco cutre) o con hojas de cómic (algo más presentable y divertido). Los envoltorios de celofán no quedan nada mal, pero claro, las transparencias es lo que tienen, ¡que no dejan lugar a la imaginación! También, por qué no, uno puede dar rienda suelta a su creatividad y pintar su propio papel de regalo, aderezarlo con pegatinas, etc. No os olvidéis, por cierto, de que las cosas delicadas deben ir protegidas por plástico de burbujitas, que siempre se agradece más que nada para pasar el rato estallándolas.
Muchos comercios van a lo rápido, de tener cajas prefabricadas o incluso envoltorios de cartón plegables... Por favor, ¡no caigáis en eso! ¿dónde queda entonces la buena suerte que da romper el papel de envoltorio?
En cuanto a los lazos, los niños os agradecerán caramelos, que quedan muy bonitos. También algo tan típico de estas fechas como las nueces pueden complementar un buen lazo. Los ramitos de flores secas le dan un aire elegante al paquete. Si es que en el fondo, cualquier cosa puede ser adecuada para decorar un regalo... nunca está de más, eso sí, que incluyáis una tarjetita poniendo para quién es el regalo (aunque en mi casa nunca hizo falta, porque mis padres siempre saben misteriosamente para quien es cada paquete).
Espero que mis consejos os sirvan de ayuda... no estaría mal compensármelo con una Nintendo DS, por ejemplo =) (o con una buena nota en diseño gráfico).
Me despido, el día 5 os dejaré unos bombones como hago todos los años, y agua para los camellos.
Adrián
P.D.1: Los regalos siempre tienen que ir en caja, que es con lo que al final siempre juegan los niños.
P.D.2: Las etiquetas donde pone el nombre de la tienda quedan muy mal y quitan emoción al asunto.
P.D.3: Hacedle también un buen regalo (y bien envuelto, claro) a mi amiga Marta, que me ha ayudado a escribir esta carta.